Inactividad Física y Rendimiento

«La inactividad física aumenta el riesgo de sufrir hasta 35 enfermedades crónicas, entre ellas el cáncer, el síndrome metabólico, las enfermedades cardiovasculares, la depresión o la degeneración del sistema nervioso»

💰»Si la tendencia de inactividad física se mantiene, el coste global de la inacción sobre este problema alcanzaría aproximadamente los 47.600 millones de dólares al año durante la próxima década»

INTRODUCCIÓN

Actualmente, debido al avance tecnológico hemos sufrido muchos cambiados en nuestros hábitos de vida y como no podía ser de otra manera, ha cambiado también nuestra vida laboral, en la que pasamos mucho tiempo sin movernos o sentados.

A pesar de que parezca que es bueno para nosotros, nada más lejos de la realidad.

Es lo que llamamos inactividad física o sedentarismo que tienen muchas consecuencias negativas para nuestra salud.

Vamos a analizar qué consecuencias tiene el sedentarismo en el trabajo y cómo podemos evitarlo.

Contenido

Las nuevas tecnologías nos han aportado muchos cambios en nuestras vidas y también en nuestro trabajo, cada vez más personas trabajamos sentados delante de un ordenador, o sentados delante de escritorio o sentados en una máquina que sustituye nuestra fuerza física, por lo tanto, pasaremos sentados 8 horas, durante toda nuestra jornada laboral. También el estar de pie delante de una máquina supone que no tengamos actividad física. Lo que conlleva el sedentarismo o la inactividad física.

Aunque parece que sedentarismo e inactividad física es lo mismo, en realidad existen diferencias:

• El sedentarismo se define como “cualquier actividad que se realiza en una postura sentada, reclinada o tumbada, mientras estamos despiertos, y con un gasto energético bajo”.
• La inactividad física “es cuando una persona no alcanza los niveles de actividad física recomendados para mantener una salud óptima y prevenir una muerte o aparición de enfermedades prematuras”.

Consecuencias del sedentarismo e inactividad física laboral

El trabajo ocupa un lugar destacado en nuestras vidas que condiciona nuestra salud y la calidad de vida.

El sedentarismo y la inactividad física tiene consecuencias para nuestra salud y puede aumentar los problemas de salud, como:

• Dolores musculares y contracturas. Las dolencias más habituales son problemas de cuello y espalda, tensión muscular o contracturas. Un ejemplo, el dolor de espalda, el cual debemos prevenir con una postura adecuada y trastornos musculoesqueléticos como pueden ser la lumbalgia.
• Problemas de circulación. Pueden aparecer problemas circulatorios, sobre todo por la falta de movimiento, que puede causar inflamación de las piernas.
• Pérdida de masa muscular
• Tensión arterial alta y diabetes.
• Exceso de peso.
• Dolencias cardiovasculares.
• Tumores.
• Problemas de alteraciones cognitivas, varices, sobrepeso
• Problemas de sobrepeso y obesidad.
• Cambios en el carácter, como pueden ser el mal humor y la falta de energía.
• E incluso muerte prematura.

Existen estudios que afirman, “el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares o diabetes de tipo 2 asciende al doble en personas sedentarias, el de sufrir algún tipo de cáncer aumenta en un 13% y el de muerte prematura en un 17%”.

Como combatir el sedentarismo y la inactividad física laboral

Medidas saludables:

• Higiene postural. Mantener una buena postura con el cuerpo. Si estas sentado mantener la espalda derecha, los dos pies apoyados en el suelo y si trabajas con ordenador, colocar la pantalla a la altura de la mirada.
• Realizar pausas activas. Levántate de la silla y camina unos minutos. Cada hora, realiza una pausa activa.
• En los tiempos de descanso aprovecha para caminar un rato.
• Realiza estiramientos durante la jornada laboral. Pueden ser en el inicio y final de la jornada o en el descanso.Un ejemplo de ejercicio: «Expandir y contraer los dedos durante 10 segundos, bajar con las manos la nuca suavemente, estirar los cuádriceps llevando el talón hacia los glúteos, o subir los brazos entrelazados hacia arriba para estirar la espalda».
• Utilizar las escaleras, en lugar del ascensor. Vendrá muy bien, especialmente para los problemas circulatorios.
• Camina o utiliza un transporte saludable para ir al trabajo: aunque tan solo sean 15 o 20 minutos andando, será una buena práctica para incorporar a tu rutina. Si optas por otros medios como la bicicleta, harás ejercicio sin apenas darte cuenta.
• Opta por medios de transporte saludables. Si puedes desplazarte en bicicleta o andando, o bajar unas paradas antes, es una forma de hacer ejercicio físico sin ser consciente de ello.

Estas recomendaciones son para nuestra vida laboral. Pero si queremos una vida saludable es necesario incluir actividad física en nuestra rutina diaria fuera del trabajo. No hay porque realizar actividad física de alta intensidad, pero sí debemos realizar ejercicio de forma habitual. Como es caminar por lo menos media hora al día.

Además, todas estas recomendaciones deben ir acompañadas de una alimentación sana y equilibrada, alejándose de hábitos poco saludables.

Conclusión

Como hemos visto, debido al avance en las tecnologías, que hacen nuestro trabajo más fácil, cada vez somos más sedentarios y tenemos menor actividad física en algunos trabajos. Lo que perjudica a nuestra salud y en definitiva disminuye nuestra calidad de vida.